Como todos ya sabemos, el sistema midi es un protocolo, es solo información que va de un lado hacia otro. En este caso son notas que deben sonar como una batería dirigidos hacia la placa de sonido. Depende de la dedicación de los fabricantes de la placa, los sonidos serán mas o menos convincentes.
Si bien la convención GM planteó una solución en un momento de caos, con el tiempo esa solución se transformó en limitación. Y al cabo de unos años los músicos volvieron a los antiguos sintes con sus sonidos propios.
Gracias a los sintes soft, hoy nos podemos estandarizar de una manera menos complicada y lograr que a partir de un archivo, todos lo escuchemos de la misma manera.
Sintes soft
Los primeros eran programas que funcionaban en forma independiente (no dependían de un host o programa que los aloje) pero por desgracia los sistemas operativos y las computadoras no tenían la velocidad suficiente como para poder tocar en directo, la latencia era insoportable así que venían con algún tipo de secuenciador por pasos para poder programarlos. Luego aparecieron los que traían incorporado un puerto midi virtual, una especie de cable virtual con el que podíamos controlarlo desde nuestro secuenciador favorito pero seguía el problema de la latencia. El tema que sonaba en el secuenciador sonaba bien pero el sinte por fuera de el, sonaba con cierto retrazo.
A un fabricante se le ocurrió hacer un sampler con la posibilidad de 16 de estos cables virtuales, lo llamó GigaSampler. Si todas las pistas midi de muestro tema eran dirigidas al GigaSampler, no molestaba la latencia porque todo sonaba al mismo tiempo. Todo esto para pistas midi ya escritas o programadas, no se podía tocar en directo. Muchos músicos famosos utilizaron el GigaSampler, mucha música para cine fue realizada de esta manera.
Pensando en el concepto de “plug-in”, la empresa Steinberg fabricó el primer sinte que se podía abrir en un secuenciador (en su secuenciador Cubase). A esta tecnologia la llamaron VST (virtual studio tecnology), poco tiempo después comenzaron a aparecer montones de sintes en formato plug-ins.
Hoy en dia se conocen dos estándares de plug ins para la plataforma Windows. VST del que ya hablamos y DX basado en la estructura de los controladores DirectX.
Hubo un tiempo en el que el secuenciador Sonar solo soportaba los plu-ins DX, si queríamos utilizar un VST teníamos que adaptarlos con un programa que se llamaba VSTAdapter. Con el tiempo Cakewalk compró la licencia del programa y lo incorporó al secuenciador.
Los VST son distintos. Algunos tienen un ejecutable con su rutina de instalación como la de cualquier programa. Otros, solo son un archivo DLL (nombre del programa.dll) estos dll se deben copiar al disco rígido en forma manual. Otros son un dll acompañado por otro archivo, estos archivos que acompañan al dll son los datos que conforman su fuente de sonido. En este caso se copia el dll con sus sonido en el disco rigido. Y por último están los que tienen un instalador del plug-in y luego hay que copiar sus sonidos en forma manual. Por suerte todos los plug-ins vienen acompañados de alguna instrucción para su instalación.
Mas adelante hablaremos de los distintos tipos de sintes y de sus bondades. Lo que es importante saber es que Sonar adapta los vst y los “transforma” (por llamarlo de alguna manera) en dx pero para poder hacer esto, Sonar debe saber donde se alojan los dll de los vst.
Es muy común que al momento de instalar uno aprete el botón aceptar u ok sin saber que es lo que le está preguntando el instalador. Esto supone un problema porque en algunos casos el sinte nos pide que le digamos la ruta de donde se aloja su fuente de sonidos. Y hay quien no tiene idea de donde buscar dicha fuente. Para evitar este contratiempo, lo que recomiendo a mis alumnos es que organicen carpetas con nombres claros, antes de la instalación. Mi forma de organizar es así, una carpeta que se llama “PLUG-INS” dentro de ella dos carpetas una con el nombre “VST” y otra “DX”. Al momento de instalar o de copiar los archivos al disco rígido, lo hacemos en estas carpetas según su tipo.
Una vez organizada la carpeta de plu-ins lo que hay que hacer es darle la ruta de la carpeta VST a Sonar para que la encuentre y los adapte.
Cada vez que inicie Sonar hará un chequeo de en esa carpeta para ver si hay nuevos plug ins instalados y transformarlos. Esto lo hará en forma totalmente automática.